Las pre-bases de maquillaje se han convertido en un producto imprescindible para lucir un rostro impecable. La finalidad principal es preparar y suavizar la piel, además de darle una mayor duración a tu maquillaje.
Se recomienda usarla en pieles con imperfecciones, con acné o que ya comiencen a tener arruguitas visible, así el efecto serán más notable. Intenta no aplicar gran cantidad de producto, si no conseguirás obstruir el poro. Usa sólo la cantidad necesaria en las zonas donde lo necesites, no creas que cuanto más producto más disimularás tus imperfeccione. ¡Sé siempre natural!
La aplicación es muy sencilla. Lo primero que debes hacer es limpiar e hidratar tu piel. Lo ideal es que primero apliques un sérum específico a tu tipo de piel y, a continuación una crema hidratante. Una vez que tu piel está lista, extiende un pequeña cantidad de pre-base alrededor de tu rostro, con ayuda de tus dedos (como si fuera una crema para tu rostro). Luego, espera unos segundos y ¡lista! Ya sólo queda que te maquilles como lo haces normalmente.
Debe aplicar la base de maquillaje sobre la pre-base. Y ahora sólo tendrás que maquillar tus ojos y tus labios según la ocasión lo merezca y mostrarás un look perfecto, con una piel en la que todos se fijarán.
¡Consigue una piel si imperfecciones en un instante!
